La inflamación es la respuesta natural del cuerpo para protegerse frente al daño. Hay dos tipos: agudos y crónicos. La enfermedad aguda ocurre después de una lesión o infección, por ejemplo, cuando se corta un dedo. Crónica es una respuesta inflamatoria prolongada en el cuerpo.
Si bien la inflamación es vital para proteger y curar el cuerpo, la inflamación sostenida puede ser perjudicial y, a menudo, es una fuente de dolor y ansiedad importantes.
El CBD muestra un gran potencial como antiinflamatorio natural derivado de plantas, sin los efectos secundarios de la medicina tradicional.
El cuerpo produce endocannabinoides, que son neurotransmisores que se unen a los receptores de cannabinoides en su sistema nervioso.
Muchos estudios han demostrado que el CBD puede ayudar a reducir la inflamación al afectar la actividad del receptor endocannabinoide e interactuar con estos neurotransmisores.
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